Ser estudiante o tener un empleo en el siglo XXI e, incluso, realizar ambas actividades a la vez, es entrar a un mundo donde la tecnología es un aspecto fundamental y, por lo tanto, exige el desarrollo de nuevas competencias y habilidades laborales.
Por esa razón, las universidades de calidad hoy cuentan con una visión distinta y moderna de la educación que permite que los alumnos interactúen con la innovación y aprendan a aplicar las nuevas herramientas que tienen a su alcance.
Sin duda, esto es clave para que puedas desarrollar tu potencial al máximo y accedas a mejores oportunidades que impulsen el cumplimiento de tus metas.
Piénsalo, en el entorno global actual puedes encontrar impresoras 3D que fabrican diversos artículos, drones que reparten pizzas, autos sin conductor y materiales autosaneables, entre otras cosas, que sustituyen labores tradicionales humanas.
Toda esta tecnología exige que como estudiante y profesional aprendas a evaluar, interpretar y utilizar los nuevos instrumentos y tendencias, para optimizar tus labores.
¡Bien! Ahora que ya hablamos sobre el panorama global y la importancia de adaptarte a éste, es momento de que nos enfoquemos en las competencias y habilidades laborales específicas que te ayudarán a destacar en la era tecnológica.
Pero, para empezar, definamos a qué nos referimos con estos conceptos.
Habilidad proviene del término latino habilitas, y hace referencia a la maña, el talento, la pericia o la aptitud para desarrollar alguna tarea.
Competencia, según reportes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), supone una combinación de habilidades prácticas, conocimientos, motivación, valores éticos, actitudes, emociones y otros componentes sociales y de comportamiento que se movilizan conjuntamente para lograr una acción eficaz.
Entonces, podemos resumir que las competencias y habilidades laborales se pueden cambiar, adaptar y perfeccionar, adecuándolas a nuestro mundo actual, y que además esto es clave para lograr el éxito profesional.
En relación a esto, a continuación te mencionaremos 3 de las capacidades que demanda el siglo XXI en sus alumnos y empleados.
¡Sigue leyendo!
1. Manejo de programas computarizados
Esta es una de las primeras habilidades laborales que se convirtieron en una exigencia en el siglo XXI.
Básicamente, esta clase de programas permiten dejar a un lado los informes, cálculos y otras tareas que anteriormente se realizaban en medios físicos para trasladarlos al ámbito digital.
En la actualidad, un profesional que no domine los programas computarizados básicos, especialmente los relacionados a su área de acción, difícilmente alcanza un nivel de productividad y calidad adecuado.
Por ejemplo, un contador público tiene que manejar Microsoft Excel, además de otros sistemas de contabilidad y gestión más robustos y avanzados.
2. Interpretación de datos
Hoy las compañías que operan de manera organizada cuentan con bases de datos que almacenan información clave sobre la realidad de la organización e, incluso, el mercado en general.
Por ese motivo, independientemente de cuál profesión elijas, es importante que te preocupes por aprender a interpretar estos datos y los utilices para optimizar procesos, tareas y áreas dentro de las empresas.
Por supuesto, existen carreras en que, al estar directamente relacionadas con la gestión de negocios, el análisis de la información tiene una mayor relevancia, como es el caso de Administración de Empresas.
Al ocuparse de aumentar la productividad de las compañías, estos profesionistas tienen que comprender todas las cifras que recolectan estos sistemas y, luego, utilizarlos para la toma de decisiones.
Es por esto que un buen programa educativo de esta carrera incluye materias como Inteligencia de Negocios y Aplicaciones Informáticas.
3. Competencias digitales
Se trata de una habilidad general que engloba un conjunto de técnicas, destrezas y capacidades propias del mundo digital.
Esto incluye el entendimiento de las plataformas sociales, la utilización de Internet para optimizar tareas y, además, el uso estratégico de la información digital.
De hecho, tan importante es esta área que las universidades de calidad la incluyen como una materia de sus programas educativos, específicamente del área axiológica.
Además de contemplar esta cátedra, un plan académico de calidad está avalado por el Registro de Validez Oficial de Estudios (RVOE), emitido por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
¡Perfecto! Ya conoces 3 de las competencias y habilidades laborales que tienes que desarrollar para ser competitivo y alcanzar tus metas.
Afortunadamente, al cursar una carrera universitaria y elegir una institución educativa de calidad, no tendrás problemas para lograrlo.
Además, existen otras cualidades tradicionales para el mundo laboral que también debes desarrollar, entre éstas:
- Capacidad de trabajo en equipo.
- Creatividad.
- Resolución de problemas.
- Orientación al logro.
- Proactividad.
Sumado a esto, debes estar consciente de que otro de los efectos del auge tecnológico es la globalización.
Esto hace que el campo de acción de un profesional pueda ir más allá de su país e, incluso, de entornos en el que se habla su idioma.
Por ese motivo, el profesional de hoy también tiene que esforzarse por aprender un segundo idioma y, si es posible, muchos más.
El inglés, al ser uno de los más utilizados en el mundo de los negocios y el área digital y tecnológica en general, resulta una excelente opción, al igual que el chino, el idioma con más hablantes nativos en el mundo.
Por otro lado, para que logres tener éxito en el ámbito profesional, primero tienes que conocerte muy bien a ti mismo.
Identificar tus habilidades naturales, destrezas aprendidas y debilidades, entre otras cosas, te ayudará a seguir el camino académico y laboral adecuado.
Es por eso que resulta una buena idea que te inscribas en una universidad que te ofrezca la oportunidad de presentar una prueba de análisis de desarrollo personal o PDA, por sus siglas en inglés.
Esta evaluación, que se realiza en apenas 10 minutos, te permitirá tener una radiografía de tus fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas.
Gracias a esa información podrás generar hábitos que te ayudarán a crecer, tanto desde el punto de vista personal como del académico y profesional.
Además de esto, conocerte es esencial para comunicarte con eficacia y tener buenas relaciones interpersonales, lo que también es necesario para ser competitivo en este siglo donde predomina la tecnología.
¿Te pareció útil este contenido? Si tienes alguna inquietud acerca de este tema o deseas saber más sobre las habilidades laborales del siglo XXI y las mejores alternativas de capacitación, ¡no dudes en escribirnos en la casilla de comentarios!
